¿Que haces este finde?

Llevo 5 minutos en el blog de aure, mientras cargaba todas las fotos de nueva york ya me había leido todos los textos. Asi que no ha tenido ninguna gracia ver las fotos despues.

Bueno , no quería criticar a quien puede quitarme la opción de opinar en este blog, era solo un pequeño apunte introductorio. OS quiero proponer a todos los blogueros asiduos algo diferente. Visto que nunca van a dejar de sacar series o peliculas que llamen nuestra atención y nos hagan poner en marcha nuestr mula / torrent, está claro que la decisión de apagar la máquinita y conocer una nueva forma de entretenerse tiene que salir de nosotros.

Para quien alguna vez se platee que las piernas no se hicieron para ejercitarlas en una cinta de gymnasio, y que no solo la cabra tira al monte, ahí va esto.

Conozco un bonito sitio de cuyo nombre suelo acordarme, La Adrada, más dificil de pronunciar que de acceder. Por su posición geografica, y sus alrededores, podría tartarse del mejor lugar a donde dominguear un finde semana (muy de madrileños).

Para mi el principal atractivo es que dispones de un cerro que empieza a 500 metros del fin del pueblo, y que se eleva por encima de las nubes, de los coches, de los humos y del extress laboral. Y es que es más facil que te nieve en Semana Santa a que te encuentres con otro grupo de montañeros en sus caminos. LA senda inicial enseguida se disgrega en un sin fin de rutas que recorren todas las laderas. Tienes todos los grados de dificultad que necesites, desde caminos largos donde casi no notas la constante subida, hasta sendas como "LA repentina" donde te gustaría tumbarte en el suelo y bajar rodando.

Otro gran atractivo son las condiciones del camino, está situado en la siera de Gredos, al ser una zona de mucha vegatación el sol no molesta por muy fuerte que de. ADEMÁS a cada rato encuentras manantiales, charcas, rios, lo que te permite disponer de agua fresca sin necesidad de transportarla desde el pueblo.

Caminas, caminas, descansas, caminas, y te adentras en la naturaleza, se dejan de ver las casas del pueblo, las cuales solo se dislumbran en algunos claros en el camino. Las sendas estrechecen en cada división, y va aumentando tu armonia con el campo.

A las pocas horas de estar alli es como si hubieras crecido entre arboles. Acampas, deshaces los macutos y disfrutas de vistas privilegiadas, de las cuales, ni siquiera las fotos dan fe.

Escondidos entre caminos hay dos refugios de leñador, perfectamente mantenidos para que te permitan pasar una o varias noches. Incluso puedes encontrarte madera seca en los días lluviosos, parrillas o sartenes.

En fin supongo que no todo el mundo tiene la idea de descanso que tengo yo pero para mi todo aquello es un paraiso a 60 km de Autopistas, Semaforos, Taxistas, Porteros de Discoteca, Policia Anti-Botellon, y más miserias de la ciudad.